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Green Computing: qué es, ejemplos y objetivos

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La transformación ecológica de la informática entre normas, mejores prácticas, concienciación, nuevos procesos, sistemas informáticos y hardware y nuevas formas de utilizar los dispositivos. Los detalles del Green Computing en esta guía.

Actualizado el 05 Oct 2023

Green Computing

Green Computing tiene como primer objetivo minimizar el impacto ambiental de la industria informática, una de las más contaminantes.

¿Cómo mejorar el uso de dispositivos informáticos y adoptar prácticas de producción sostenibles?

Significado de Green Computing

Green Computing, también llamado “Computación Verde”, representa una perspectiva transformadora en el campo de la informática. Desde la creación de smartphones hasta la gestión de complejos centros de datos, esta filosofía abarca todo el ciclo de vida de los dispositivos informáticos, con un enfoque en la sostenibilidad medioambiental y la eficiencia.

Imagina un mundo donde la tecnología no solo cumple sus funciones, sino que también actúa como un aliado del medio ambiente. En este contexto, el Green Computing busca diseñar, producir y gestionar dispositivos de manera que reduzcan su impacto ecológico y promuevan prácticas sostenibles.

Historia

Hace más de dos décadas, en el año 1992, el mundo presenció un hito importante en la búsqueda de un enfoque más ecológico para la tecnología. Fue entonces cuando la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos (EPA) dio un paso valiente al lanzar el programa Energy Star. Este programa tenía un objetivo claro: identificar y etiquetar productos de hardware que fueran excepcionalmente eficientes en términos de consumo energético.

La icónica marca Energy Star, reconocible por su estrella blanca sobre fondo azul, no tardó en extenderse más allá de las fronteras de los Estados Unidos. En países de todo el mundo, incluyendo Suecia, se adoptó esta iniciativa y se adaptó para satisfacer las necesidades locales. La certificación sueca CTO se convirtió en un ejemplo de cómo las naciones de todo el mundo estaban comprometidas con la búsqueda de productos de hardware respetuosos con el medio ambiente.

Avanzando en el tiempo hasta el año 2004, el gigante tecnológico Intel Corporation tomó una decisión impactante. En lugar de seguir desarrollando los chips conocidos como Tejas y Jayhawk, Intel optó por una ruta diferente. Reconociendo que el aumento en la velocidad de los chips estaba empezando a requerir sistemas de refrigeración costosos y ruidosos, la compañía se embarcó en la búsqueda de tecnologías de chips más eficientes. Esta medida no solo significó un cambio en la estrategia empresarial de Intel, sino que también simbolizó un compromiso con la eficiencia y la sostenibilidad en la industria de la tecnología.

Estos eventos históricos, desde el lanzamiento de Energy Star hasta la decisión de Intel de priorizar la eficiencia energética, marcan hitos cruciales en la evolución de la tecnología hacia un futuro más verde y sostenible. El camino hacia una informática más ecológica y eficiente estaba tomando forma, y la conciencia medioambiental estaba arraigándose profundamente en la industria tecnológica.

Iniciativas concretas de green computing

En el mundo del Green Computing, las iniciativas concretas no se limitan a un solo ámbito, sino que abarcan diversos aspectos de la tecnología y la sostenibilidad. Algunas de las iniciativas más destacadas incluyen:

  1. Diseño de Hardware Eficiente: Los fabricantes de hardware trabajan constantemente en el desarrollo de dispositivos más eficientes desde el punto de vista energético. Esto implica la creación de computadoras, servidores y otros dispositivos electrónicos que consuman menos energía durante su funcionamiento.
  2. Fuentes de energía renovable: Muchas organizaciones están adoptando fuentes de energía renovable, como la solar o la eólica, para alimentar sus centros de datos y operaciones informáticas. Esto reduce la huella de carbono de la tecnología.
  3. Virtualización: La virtualización permite utilizar un solo servidor físico para ejecutar múltiples máquinas virtuales, lo que mejora la eficiencia y reduce la necesidad de más hardware.
  4. Reciclaje de hardware: La gestión responsable del ciclo de vida del hardware informático es esencial. Esto incluye la reutilización de equipos, la donación de dispositivos aún funcionales a organizaciones sin fines de lucro y el reciclaje adecuado de componentes electrónicos.
  5. Gestión de energía: Las soluciones de gestión de energía controlan y optimizan el consumo eléctrico de los dispositivos informáticos, lo que puede llevar a importantes ahorros de energía.
  6. Data centers ecológicos: El diseño eficiente de centros de datos es fundamental para reducir su consumo de energía. Esto incluye la gestión del enfriamiento, la eficiencia en el uso del espacio y la implementación de tecnologías de recuperación de calor residual.
  7. Energía inteligente en dispositivos: Los dispositivos informáticos modernos incorporan funciones de ahorro de energía, como la hibernación y el modo de suspensión, para reducir el consumo eléctrico cuando no están en uso.
  8. Educación y conciencia: Fomentar la educación y la conciencia entre los usuarios y profesionales de la informática sobre prácticas sostenibles y la importancia del Green Computing.
  9. Cumplimiento normativo: Las regulaciones ambientales cada vez más estrictas están impulsando a las organizaciones a adoptar prácticas más verdes en sus operaciones informáticas.

Contribución al Desarrollo Sostenible

El Green Computing  o informática verde se ha convertido en un elemento esencial para contribuir al desarrollo sostenible, y tanto Europa como varios países de América Latina están adoptando medidas significativas para promover esta iniciativa.

En el contexto europeo, el Pacto Verde Europeo ha establecido objetivos ambiciosos para lograr una economía neutra en carbono para 2050. Esto implica una reducción significativa de las emisiones de carbono y un impulso a prácticas más sostenibles en todos los sectores, incluida la tecnología. Europa se está esforzando por adoptar tecnologías más verdes y eficientes energéticamente en la industria informática, desde la producción de hardware hasta la gestión de centros de datos.

Además, la Unión Europea ha promulgado regulaciones ambientales más estrictas para la industria de la tecnología, que incluyen restricciones sobre sustancias peligrosas y requisitos de eficiencia energética. Estas regulaciones están diseñadas para promover la producción de dispositivos electrónicos más sostenibles y reducir el impacto ambiental.

En América Latina, países como Argentina y Chile están adoptando medidas similares para fomentar el Green Computing. Argentina, por ejemplo, ha promovido la eficiencia energética en la tecnología de la información y la comunicación (TIC) a través de regulaciones y estándares específicos. Chile también ha impulsado la eficiencia energética en centros de datos y ha implementado programas de certificación para equipos y tecnologías más eficientes desde el punto de vista energético.

En resumen, tanto Europa como varios países de América Latina están reconociendo la importancia del Green Computing como parte integral de sus estrategias de desarrollo sostenible. Están implementando regulaciones más estrictas y promoviendo prácticas más respetuosas con el medio ambiente en la industria de la tecnología para reducir su huella de carbono y avanzar hacia un futuro más verde y sostenible.

Enfoque holístico

En la búsqueda de un enfoque holístico para el Green Computing, es fundamental considerar una serie de aspectos clave que abarcan desde el diseño hasta la eliminación de dispositivos tecnológicos. Estos elementos son esenciales para promover la sostenibilidad medioambiental y maximizar la eficiencia energética en todos los niveles de la industria de la tecnología.

Diseño

En la etapa de diseño, se plantea el desafío de crear computadoras, servidores y centros de datos que sean no solo poderosos y eficientes en términos de rendimiento, sino también amigables con el medio ambiente. Esto implica la adopción de un diseño que tenga en cuenta el consumo energético reducido y la alta eficiencia energética. Se buscan soluciones que minimicen el gasto de energía durante la operación y que aprovechen al máximo los recursos disponibles. La clave es crear tecnología que haga más con menos energía.

Fabricación

La producción de dispositivos tecnológicos es otro punto crucial en la ruta hacia el Green Computing. Aquí, se fomenta el uso de fuentes de energía alternativas y la reducción de residuos en la cadena de producción. Esto significa adoptar prácticas de fabricación sostenibles que minimicen la huella de carbono de la industria tecnológica. La elección de materiales y procesos de fabricación respetuosos con el medio ambiente se convierte en una prioridad.

Uso

Una vez que los dispositivos están en manos de los usuarios, es fundamental promover un uso respetuoso con el medio ambiente. Esto se logra mediante la implementación de funciones de ahorro de energía y modos de suspensión en los dispositivos. Los usuarios pueden contribuir significativamente al ahorro de energía simplemente configurando sus dispositivos para que entren en modo de bajo consumo cuando no están en uso. Esta práctica reduce la demanda de energía y, a su vez, las emisiones de carbono.

Eliminación

Finalmente, la fase de eliminación de dispositivos tecnológicos juega un papel crucial en el ciclo de vida del producto. Aquí, se aboga por una eliminación segura mediante prácticas de reciclaje adecuadas. En lugar de desechar dispositivos electrónicos en vertederos, se promueve su reciclaje para recuperar materiales valiosos y reducir el impacto ambiental. Además, se destaca la importancia de gestionar adecuadamente los desechos electrónicos, especialmente aquellos que contienen componentes tóxicos.

En conjunto, este enfoque holístico abarca todas las etapas, desde la concepción hasta la disposición final, y tiene como objetivo transformar la industria tecnológica en una fuerza positiva para el medio ambiente. El Green Computing se convierte así en una búsqueda constante de prácticas más sostenibles y eficientes que benefician tanto a la industria como al planeta.

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Objetivos de Green computing

Los objetivos de Green Computing no solo abarcan la eficiencia energética, sino que se extienden a un compromiso más amplio con la sostenibilidad y la responsabilidad medioambiental en el mundo de la tecnología. Esta visión integral busca transformar la industria tecnológica en una fuerza positiva tanto para el medio ambiente como para la economía. Aquí, te desglosamos estos objetivos en detalle.

  • Reducir emisiones de gases de efecto invernadero: Uno de los principales objetivos del Green Computing es contribuir a la lucha contra el cambio climático al reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Esto se logra al optimizar el consumo de energía de los dispositivos y centros de datos, lo que disminuye su huella de carbono. Al mismo tiempo, esta eficiencia energética conlleva a un ahorro significativo de dinero para las organizaciones y empresas que adoptan prácticas más sostenibles.

  • Promover prácticas sostenibles en la producción: El camino hacia el Green Computing implica la promoción de prácticas sostenibles en la producción de tecnología. Esto significa que desde el diseño hasta la fabricación, se buscan métodos que minimicen el impacto ambiental. La utilización de fuentes de energía alternativas en la fabricación y la reducción de residuos son elementos clave de esta iniciativa.

  • Aumentar la Durabilidad: Un objetivo fundamental es aumentar la durabilidad de los productos tecnológicos. Esto implica diseñar dispositivos que sean resistentes y puedan extender su ciclo de vida útil. Al limitar la obsolescencia prematura, se evita que los dispositivos sean desechados antes de tiempo, lo que a su vez reduce los residuos electrónicos.

  • Reciclaje y Eliminación: La gestión adecuada de los dispositivos al final de su vida útil es esencial. Esto incluye el reciclaje y la eliminación segura de los dispositivos tecnológicos. Evitar que sustancias nocivas terminen en vertederos y fomentar la reutilización de componentes son prácticas clave en esta fase.

  • Gestión de la Energía: Lograr una mayor eficiencia energética es otro objetivo importante. Esto implica la adopción de tecnologías y prácticas que reduzcan el consumo de energía de los dispositivos y centros de datos. Utilizar fuentes de energía renovable, controlar cuándo y dónde se necesita más electricidad y reutilizar la energía residual son estrategias esenciales para alcanzar este objetivo.

  • Diseño de Centros de Datos: Finalmente, el diseño ecológico de centros de datos es esencial en el camino hacia el Green Computing. Esto abarca no solo la eficiencia de los sistemas informáticos, sino también los sistemas eléctricos, sistemas de refrigeración, condiciones ambientales y más. La optimización del espacio, la eficiencia y el rendimiento son factores clave en la creación de centros de datos más sostenibles.

Ejemplo de implementación de green computing

  1. Google: Google ha liderado el camino en la adopción de prácticas sostenibles en sus centros de datos. Han implementado estrategias de enfriamiento eficiente, como el uso de agua de mar para enfriar sus servidores en Finlandia. Además, se han comprometido a utilizar energía 100% renovable en todas sus operaciones para 2022.
  2. Facebook: Facebook ha diseñado sus centros de datos en Iowa para ser altamente eficientes en el consumo de energía. Utilizan diseños de servidores personalizados que reducen el consumo de energía y han establecido el objetivo de que el 100% de su energía sea renovable.
  3. Microsoft: Microsoft ha implementado un programa llamado “Madre Tierra” que busca reducir su huella de carbono. Han invertido en proyectos de energía renovable, como parques eólicos, y están comprometidos con eliminar más carbono del que emiten para 2030.
  4. Apple: Apple opera sus centros de datos con energía 100% renovable y ha trabajado en la reducción del consumo de energía en sus dispositivos. También utilizan materiales reciclados en la fabricación de productos como el iPhone.
  5. Universidad de Stanford: La Universidad de Stanford implementó un proyecto de enfriamiento de agua de mar para sus centros de datos, lo que les permitió reducir drásticamente su consumo de energía y su huella de carbono.
  6. Accenture: Accenture ha adoptado prácticas de trabajo remoto en sus operaciones, lo que ha reducido significativamente la necesidad de viajes y la huella de carbono de sus empleados.
  7. Unilever: Unilever utiliza tecnologías de virtualización de servidores para optimizar el uso de recursos en sus centros de datos, lo que les ha permitido reducir su consumo de energía.
  8. Telefónica: Telefónica ha implementado soluciones de gestión de energía en sus centros de datos para mejorar la eficiencia energética y reducir el consumo de electricidad.

Artículo publicado originalmente en 16 Mar 2023

Prohibida su reproducción total o parcial.

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