La tecnología ha avanzado mucho y en la última década se ha observado una aceleración sin precedentes. Hoy vivimos en un mundo completamente digitalizado donde abundan los dispositivos electrónicos y existe un sinfín de herramientas tecnológicas que apuntan “simplificarles la vida a las personas”, tanto en el ámbito laboral como en el personal.
Producto de los innumerables dispositivos que existen hoy conectados a la red, la cantidad de datos que se generan constantemente es realmente sorprendente. No obstante, a veces es tan grande ese caudal de información que muchas empresas no logran aprovechar esta situación al máximo.
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Inversión en Big Data: un desafío
Invertir en Big Data no solo implica un desafío económico, sino también de seguridad. Como decíamos, si bien las organizaciones pueden almacenar cantidades titánicas de informaciones relacionadas a su logística, colaboradores, clientes y procesos, también es cierto que, dada su relevancia, deben saber cómo proteger esos datos para que no caigan en las manos equivocadas.
La realidad de México
Pese a que todavía tienen un largo camino por recorrer, las empresas mexicanas ya están tomando nota sobre su importancia. De hecho, de un relevamiento que fue publicado en eSemanal, se desprende que el 33% de las compañías de este país está dispuesta a invertir en innovación, incluyendo aquí al Big Data, además de la Analítica y Ciencia de Datos.
Víctor Miramón, especialista en el tema, describe que el análisis de Big Data permite a analistas, investigadores y usuarios de negocios tomar decisiones mejores y más rápidas, utilizando datos que antes eran inaccesibles o inutilizables.
En ese sentido, observa una “gran oportunidad en la analítica de Big Data, ya que hoy se pueden utilizar técnicas analíticas avanzadas contra conjuntos de datos muy grandes y diversos, incluyendo: datos estructurados, semiestructurados y no estructurados”.
