Considerando el aporte de las abejas hacia el ecosistema y lo vitales que son para el desarrollo de alimentos a nivel global, un grupo de especialistas en ingeniería y biotecnología chileno decidió colaborar con la causa a través de un desarrollo súper innovador, al que llamaron “The Earth Says”
En diálogo con el Diario Sustentable, Estaban Vásquez, CEO y uno de los fundadores, cuenta que tanto él como sus socios eran conscientes del rol “crucial” de las abejas melíferas y, teniendo en cuenta eso es que decidieron “contribuir” en el proceso de polinización agrícola.
Además, su plataforma aparece en un momento clave donde el 50% de la población de abejas Apis melíferas han muerto en los últimos años. Por distintas razones. Una de ellas está vinculada al calentamiento global, repercutiendo en la disminución de la flora y la fauna.
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¿En qué consiste esta plataforma de AgroTech?
Tal como describe este medio, se trata de una start up que optimiza la polinización agrícola mediante el desarrollo de un sistema que ofrece un completo análisis y monitoreo de la etapa de floración de cultivo.
¿Cómo lograron esto?
Primero, a través de la implementación de un software que es capaz de cuantificar el área de calor que generan las colmenas a través de una cámara IR, “información que se relaciona al número de marcos poblados en la colonia y a la población al interior de estas, para evaluar colmenas de manera rápida y efectiva sin necesidad de abrirlas”, detalla este medio trasandino especializado en sustentabilidad.
Con este primer análisis se seleccionan las colmenas representativas para instalar dispositivos loT que funcionan como un pórtico para las colmenas. Luego, implementando tomas de videos y modelos de inteligencia artificial se identifica y cuenta cada abeja que sale y entra, con y sin polen, de la colonia.
A su vez, dentro del campo instalan cámaras dentro de puntos específicos con el objetivo de ver el crecimiento de las plantas y el desarrollo de la floración. “Con toda esta información, más las condiciones del clima que se registran con sensores, se calcula un índice de polinización que permite entregar alertas y recomendaciones a los agricultores para mejorar y potenciar el proceso”, añade Vásquez.
Para finales del 2022 apuntan trabajar en un total de 2.500 hectáreas, monitoreando 25.000 colmenas y ayudando entre 25 a 50 apicultores aproximadamente.
