La IA revolucionó muchos ámbitos laborales contemporáneos y alteró de manera significativa la naturaleza del empleo a nivel mundial. Los líderes empresariales están reconociendo la productividad y el potencial de crecimiento que la IA ofrece al respaldar a los empleados con nuevas herramientas inteligentes.
Como publicó Forbes Argentina, para 2030 se experimentará un cambio crucial en los requisitos laborales a medida que la IA acelere las transformaciones en el lugar de trabajo, lo que impactará como mínimo en un 65% en las habilidades necesarias.
Una nueva modalidad
En los últimos dos años, los datos de LinkedIn muestran un notorio incremento en las ofertas de trabajo que mencionan específicamente la aplicación de IA. Mientras la demanda de estos roles está creciendo, el 89% de los profesionales en todo el planeta están entusiasmados con la idea de utilizar la IA en sus áreas, y un 57% tiene un gran interés en saber más sobre esta tecnología.
El propósito principal de incorporar la IA en los entornos laborales es fortalecer las habilidades intrínsecas de las personas. Al respaldar las tareas repetitivas y monótonas, la IA prepara el camino para que los profesionales se centren en esfuerzos intrínsecamente humanos, como aquellos que requieren empatía, perspicacia y discernimiento.
Dentro de este mapa, las responsabilidades y la influencia de los sectores de reclutamiento y Recursos Humanos (RRHH) están creciendo, ya que ahora son cruciales para dar forma a la visión estratégica de las organizaciones y garantizar que cuenten con las habilidades requeridas.
Además, la IA está permitiendo descubrir nuevas herramientas que permiten a los profesionales del talento contratar más rápido y otorgar aprendizaje personalizado para los trabajadores.
Un 61% de los profesionales de recursos humanos ya ha integrado herramientas de IA en sus flujos de trabajo diarios, y un porcentaje similar auspicia la formación centrada en la IA para sus sectores. Por ello, la IA es una base que dará forma a sus funciones en el futuro, especialmente en la mejora de las interacciones humanas.
Para los líderes y organizaciones, es vital mantenerse al tanto de los avances en la IA. Los jefes deben liderar la comprensión y adopción de sus innovaciones. Esta era de cambios necesita de un aprendizaje organizacional continuo, donde la mejora constante de las habilidades sea una matriz. Asignar recursos a la educación centrada en la IA fortalece la lealtad de los empleados hacia empresas que respaldan su desarrollo personal y profesional.
Además, los líderes del futuro combinarán hábilmente los conocimientos tecnológicos con inteligencia emocional. Si bien la IA ofrece buenas recomendaciones basadas en datos, el papel insustituible de los líderes humanos radica en su habilidad para interpretar el contexto, planificar visionariamente y fomentar vínculos emocionales reales con sus equipos. Las instituciones que integren armoniosamente la IA con la potenciación del talento humano estarán a la vanguardia del cambiante mundo del trabajo.
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