La compañía fundada por Jeff Bezos, Amazon, hace un tiempo comenzó a sufrir un problema que décadas atrás era impensado en los Estados Unidos. O al menos, no con la frecuencia con la que se está observando ahora.
¿De qué estamos hablando? Del robo de los paquetes de entrega en los hogares. A diferencia de lo que ocurre en América Latina o España (por una cuestión lógica de seguridad), en Estados Unidos se acostumbra a dejar el paquete en la puerta de la casa que cuando un repartidor lleva una compra y no hay quien la reciba.
Por eso, dada esta realidad, es que a la reconocida plataforma de comercio electrónico se le ocurrió una solución, que por ahora solo está disponible en Washignton DC, pero que podría extenderse a otros territorios en un futuro no tan lejano. Se trata de un nuevo programa que puso en marcha la empresa para que los usuarios puedan enviar y recoger sus paquetes en una comisaría.
A modo de prueba
De esta manera, el comprador se puede asegurar que su paquete está a salvo y Amazon evitarse un dolor de cabeza por los robos que venía sufriendo. Por el momento se viene implementando en algunas comisarías de la ciudad, aunque si todo marcha bien seguramente lo vayan expandiendo aún más.
Tal como cuenta El Economista, durante el proceso de compra, al retailer le aparecerá una opción que es la de enviarla a una de estas comisarías disponibles. Siempre y cuando el usuario sea residente de dicha ciudad.
Al parecer, la opción de que el repartidor regrese otro día no es del agrado de Jeff Bezos. Algo que de todas formas tiene lógica, ya que no solo implica una inversión de dinero, sino también de recursos. Habrá que ver cómo evoluciona esta nueva propuesta de Amazon y si puede replicarse en Europa y otros lugares de Latinoamérica.
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